La dieta proteica o dieta de las proteínas está basada en restringir la ingesta de carbohidratos y en aumentar el consumo de alimentos ricos en proteínas como las carnes bajas en grasas, huevos o frutos secos. Es una dieta que se ha vuelto muy popular entre los deportistas porque contribuye a aumentar de manera efectiva la masa muscular. También tiene éxito entre las personas que quieren perder peso porque está basada en cinco comidas diarias, lo que mantiene activo el metabolismo y da sensación de saciedad.
Un exceso de proteínas en la dieta puede generar sin embargo algunos problemas y entre ellos la dificultad para evacuar o la disminución de las deposiciones.
¿Por qué estriñe el exceso de proteínas?
Las proteínas son largas cadenas de aminoácidos esenciales para una buena alimentación, dado que fortalecen el sistema inmunitario y ayudan a la recuperación de los músculos. Las proteínas por sí mismas no causan estreñimiento. La cuestión es que las dietas proteicas o aquellas que incluyen un número excesivo de proteínas lo hacen en detrimento de otros componentes como la fibra. La fibra es imprescindible para regular correctamente el funcionamiento del tracto intestinal y para eliminar elementos que potencialmente pueden ser irritantes para este. Las proteínas animales en las que se basan este tipo de dietas no contienen fibra, que se encuentra principalmente en verduras, frutas y granos. Su ausencia es la que provoca el estreñimiento.
¿Cómo se puede aliviar el estreñimiento ligado al exceso de proteínas en la dieta?
Existen una serie de medidas que pueden contribuir a aliviar el problema de estreñimiento ligado a una dieta rica en proteínas.
Aumenta los alimentos ricos en fibra
Una forma fácil de aliviar el estreñimiento es aumentar la cantidad de alimentos ricos en fibra que incluyes en tu dieta. Esta favorece las deposiciones añadiendo volumen a las heces. Combina las proteínas con frutas (con piel), verduras, legumbres como los garbanzos o las lentejas y alimentos integrales que te ayudarán a regular las evacuaciones.
Di sí al aceite de oliva
El aceite de oliva es una grasa saludable que puede ayudar a cocinar y aliñar diferentes preparaciones. Su uso suaviza las heces y mejora el tránsito intestinal.
Incrementa la ingesta de líquidos
Aumenta la cantidad de agua o líquidos que bebes al día hasta el litro y medio o dos litros. Hidratarse es crucial para el buen funcionamiento del intestino, especialmente en lugares con climas cálidos y húmedos. La falta de agua suficiente puede hacer que el colón seque en exceso la materia fecal, lo que dificulta las deposiciones. Reducir la cantidad de alcohol u otras bebidas como el café que contribuyen a la deshidratación de nuestro cuerpo es también importante.
Utiliza un complemento alimenticio
Para ayudar a restablecer la regularidad del tránsito intestinal y contribuir a mantener la mucosa intestinal, una solución sencilla es utilizar de manera habitual un complemento alimenticio. Fuca Regularidad con una combinación única de activos naturales como la frángula o el alga de roca pueden ayudar a favorecer y regular las evacuaciones.
Establece unas rutinas regulares.
El contar con una rutina regular de sueño, comida y descanso es fundamental para regularizar el reloj biológico del cuerpo. La actividad de los intestinos se ve afectada como toda la actividad de nuestro cuerpo por los ritmos circadianos. Es decir, el cuerpo percibe si nuestros horarios o ritmos de vida no son regulares y altera sus hábitos. Una de las manifestaciones puede ser la dificultad para evacuar.
Come tranquilamente
Realizar cinco comidas a lo largo del día puede ayudar a ir al baño, puesto que el comer con más frecuencia y de manera tranquila y sin prisas ayuda a hacer la digestión e incentiva la labor del tracto intestinal.
Mantente activo
El ejercicio físico regular es necesario para mantener todos los procesos de nuestro cuerpo en perfecto funcionamiento. Un paseo diario de una hora o salir a correr todas las mañanas antes de ir al trabajo o de hacer cualquier otra actividad es perfecto para incentivar la actividad intestinal. Además, la práctica de deporte con regularidad refuerza la pérdida de peso y es beneficioso para la salud.
Mantén a raya el estrés
La ansiedad, el estrés y los cambios emocionales también afectan a las miles de neuronas de nuestro intestino y afectan a tu regularidad para evacuar. Así que es conveniente respirar hondo e intentar estar lo más relajado y sereno posible.
No demores el momento de ir al baño
Muchas personas se sienten incómodas a la hora de ir al baño en lugares públicos como la oficina o un restaurante, por lo que suelen demorar el momento de evacuar. Es recomendable no alterar voluntariamente las pautas de nuestro intestino. Conviene escuchar al propio cuerpo e ir al baño cuando sea necesario. El retener o posponer las evacuaciones puede contribuir a que la regularidad normal de las deposiciones se vea afectada.
Modificando sencillamente nuestros hábitos cotidianos y algunos elementos de nuestra alimentación es posible contribuir a solventar el problema de estreñimiento derivado de una dieta con exceso de proteínas.